Necesito... encontrar una torre que consiga soportar grandes cargas, que tenga un buen soporte, que tenga unos buenos cimientos y en la cual, pueda sentirme bien.
La verdad, estoy algo espesa, las palabras no me fluyen.
No bailan al son que mis dedos teclean...
Me siento extraña.
Tengo un cúmulo de sentimientos que no son fáciles de plasmar.
Siento anhelo causado por la falta de... ¡báh! ¡Y qué más da!
Siento tristeza causada por el angelo anterior...
Oh, vaya, creo que en general me siento...
Hmmm... ¿Cuál es la palabra adecuada...?
Digamos que me siento descaida y desanimada.
Recuerdo una noche.
Estaba en mi cama conectada al messenger desde el móvil.
Hacía un poco de frío, por lo que estaba arropada con mis sábanas.
Mi perra estaba subida a la cama, a mi izquierda, con su cabeza apoyada en mi panza.
Él, a través de mi móvil, desde su ordenador, me dijo que le gustaban mis ojos y mis labios.
Le pedí que me dijera qué le gustaba de ellos.
Su respuesta fue...
"Tus ojos... Son intensos...De un color verdoso y marrón muy bonito.
Tus labios... Son color rosa chicle y muy carnosos..."
Palabras que puede que para una persona normal no tengan sentido, pero para mí, sí.
¡LAS DIJO ÉL!
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